Colaboradores

Hemos (aunque este plural me resulta resbaloso) interrogado  a nuestros colaboradores a propósito de sus expectativas, proyectos, inquietudes, y un largo etcétera, acerca de verbo en calistenia y esto es lo que nos han contestado...
 
Fabián Coelho: «Me temo que ahora sí no tengo excusas. No sólo me metí en el peo de abrir este blog (culpa de Eric y Vanessa), ahora lo tengo que mantener y, además, escribir para él».
 
Boris Angulo: «Con este comentario (obligado y nervioso) no pretendo decir que entendí algo de este correo que recién recibo (se refiere al correo del entrevistador, tan malpagado y maltratado...), de hecho, nada entiendo, lo único que sí supe fue que debía responder a no sé qué y enviar un correo a "todos" no sé para qué. Mas sí, también supe que debo escribir así sea a regañadientes o a palos. "Hay que hacer algo", conozco bien esa expresión, no sé si era mía, de Fabián, de Vanessa, de algún otro, o de "todos". Veré qué me animo a publicar, claro, después de escribirlo (risas estúpidas), pero aviso, y Fabián podrá ponerlos al día, soy necio y poco convencible (justificado por mi ignorancia en el asunto), así que mis comentarios sobre sus textos no serán nada alentadores. De igual forma, espero que los suyos sobre los míos (textos) sean los más rudos que jamás haya leído. Mi idea es mejorar, tener menos miedos, pero con buenas críticas no lo haré, necesito escuchar lo negativo, lo que está mal, lo que suena terrible, lo que no atrapa, lo que no sirve para nada, etc., así que pediré la ayuda de los duchos en el asunto, de los verdaderos literatos, de ustedes. Nos vemos pronto en verbo en calistenia. Varios abrazos para "todos"».

Georgina Uzcátegui: «¡Aaahhh! Buena forma de empezar a hacer calistenia verbal en este recién estrenado año. Ante tantos criterios encontrados, se refleja, entre otras cosas, mentes inquietas y palabras en la punta del lápiz, bolígrafo, ordenador (como a cada quien le vaya), a punto de saltar sobre la temida hoja en blanco; el ejercicio de la palabra contenida hasta ahora por muchas y verosímiles razones. Enhorabuena, la mesa está servida. Espero mucho de este banquete de ideas, palabras y silencios. La idea, pues: confrontar discursos, narrativas, imágenes; encontrar (recuperar), en este ejercicio libérrimo del pensar y escribir, las palabras que nos lleven a una reflexión, pero ante todo recuperar la belleza lúdica, que es la razón última de la escritura y sus avatares».

Vanessa Márquez: «Espero que los ejercicios del blog me sirvan para sacar unas cuantas cosas que se han quedado guardadas en el cajón o en el cuadernito verde por atender otras cosas "más importantes", por sueño o simplemente porque no me he sentido capaz de "escribirlas". Me gustaría tener variedad de propuestas, temas, disparadores, para que hagamos más dinámico el asunto».